03. El Proceso Digestivo

La digestión es la transformación de los alimentos ingeridos en otras sustancias más sencillas para poder ser absorbidas por el cuerpo (más concretamente por la sangre) proporcionándole la  energía necesaria para vivir.

Se trata de un proceso metabólico, es decir un proceso en el que los alimentos se transforman en energía. Este proceso consiste en tomar los alimentos, aprovechar los nutrientes de estos alimentos y eliminar las sustancias de desecho.
La digestión y el aparato digestivo comienza en la boca donde al masticar y mezclar el alimento con la saliva se forma lo que se conoce como el bolo alimenticio.  La lengua lo empuja hacia atrás y entonces ingresa en la faringe y sigue su camino hasta el esófago. El paso del bolo alimenticio de la boca a la faringe se llama deglución.

Posteriormente el bolo alimenticio llega al estómago a través del esófago. 

Una vez en el estómago al bolo alimenticio se junta con los jugos gástricos formando una papilla llamada quimo. Luego pasa al intestino delgado y se mezcla con la bilis que manda el hígado, con los jugos pancreáticos procedentes del páncreas y con los propios jugos intestinales formando lo que se llama el quilo.

En el intestino delgado, y con la colaboración imprescindible de la bilis y el jugo pancreático, se completa la digestión de los alimentos, que así quedan preparados para ser absorbidos. Los alimentos así preparados se dice que se han digerido.

El siguiente paso es la absorción, es decir conseguir que los alimentos digeridos pasen a la sangre. La absorción se produce cuando los alimentos digeridos atraviesan las vellosidades intestinales y entran en los vasos sanguíneos.

Conseguido que los alimentos pasen a la sangre, esta los distribuye a todos los órganos del cuerpo.

Las partes no digeridas, o desechos siguen su camino por el intestino delgado hasta el intestino grueso, donde, por una serie de movimientos involuntarios llamados movimientos peristálticos, van avanzando hacia el recto.

La eliminación de los desechos se hace por el ano, cuando el organismo nota que en el intestino grueso se ha acumulado una cantidad excesiva de desechos. Estos desechos, al ser eliminados, se llaman heces fecales.

El resultado de la digestión es que, respecto a los glúcidos, todos los que son digeribles se transforman en glucosa, otros en monosacáridos,  pasan a la sangre.

Los lípidos se separan en ácidos grasos y glicerina para atravesar la pared intestinal. Algunos lípidos no pasan por este proceso, sino que son directamente trasladados a los capilares sanguíneos que riegan el intestino.


Por último, las proteínas se dividen en aminoácidos, que también son absorbidos y pasan a la sangre.

02. Alimentos y Nutrientes

Todo alimento es aquel que los seres vivos comen y beben para su subsistencia. El término procede del latín “alimentum”: lo que se ingiere para crecer y subsistir. Permite nombrar a cada una de las sustancias solidas o liquidas que nutren a los seres humanos, las plantas o los animales.Los tratados de bromatología (la ciencia que estudia los alimentos) consideran que el alimento es una forma de proporcionar al ser vivo los materiales indispensables para el mantenimiento de sus funciones (crecimiento, restauración y buen funcionamiento de los órganos). Es, por tanto, el vehículo que aporta materias necesarias para la vida (nutrientes).En la actualidad, este concepto se está ampliando y se empieza a considerar como alimento a sustancias que se ingieren y que no contienen nutrientes o elementos necesarios para el organismo (un ejemplo podría ser el edulcorante).Los nutrientes, como nombrábamos anteriormente, es el elemento nutritivo de un alimento. Se pueden distinguir dos clases de nutrientes:
  • Nutrientes esenciales: son los que el organismo no es capaz de sintetizar por su cuenta. Existen en torno a 50 nutrientes esenciales:
  • Vitaminas.
  • Agua, sales minerales y oligoelementos.
  • Aminoácidos, tales como la histidina y la isoleucina.
  • Ácidos grasos: concretamente el ácido linoleico y el linolénico.
  • Nutrientes energéticos: son los nutrientes que podemos sintetizar partiendo de materias más simples.
Requerimiento de un nutriente: Es la cantidad necesaria para el sostenimiento de las funciones corporales del organismo humano dirigidas hacia una salud y rendimientos óptimos en una etapa determinada de su vida y en condiciones estándar de actividad y temperatura ambiental.
Aporte aconsejado: La cantidad de un nutriente concreto que cubra las necesidades de las personas sanas de una población.
Alimentación y Nutrición.

La Alimentación es el proceso por el cual los seres vivos consumen diferentes tipos de alimentos con el objetivo de recibir nutrientes necesarios  para su correcto desarrollo.

La Nutrición es el conjunto de procesos por los cuales el organismo recibe, transforma y utiliza las sustancias químicas contenidas en los alimentos que consume, utilizando y en su caso formando los materiales imprescindibles para el mantenimiento del propio organismo.

A pesar de que presentamos estos dos conceptos en el mismo apartado, ambos son distintos, ya que la alimentación es la consecuencia de diversas actividades totalmente voluntarias, las cuales permiten proporcionar sustancias aptas para su consumo, las va modificando mediante diversos procesos, para finalmente consumirlas. Después de este proceso es donde comienza la nutrición.

A partir de aquí es donde las sustancias nutritivas son absorbidas por el sistema digestivo, para posteriormente transportarse a los tejidos y ser usadas por estos. La principal diferencia entre alimentación y nutrición es que esta última es un acto inconsciente, al contrario que la alimentación, que es totalmente voluntaria. Como consecuencia, la alimentación llega a poder ser educada a lo largo de los años y somos capaces de adaptarla a determinadas fases vitales, influyendo de esta forma en los procesos nutricionales.


Destacamos que la nutrición depende de la alimentación, y viceversa, es decir, son dependientes ambos procesos.